Cada noviembre, el movimiento global Movember impulsa conversaciones sobre la salud masculina, enfocándose principalmente en la prevención del cáncer de próstata, cáncer testicular, salud mental y riesgo de suicidio en hombres. Aunque comenzó como una campaña simbólica donde los hombres se dejan crecer el bigote, la iniciativa ha demostrado ser una plataforma poderosa para promover el acceso a información, atención médica preventiva y apoyo emocional.
La salud masculina suele ser un tema poco visibilizado. Culturalmente, los hombres han sido menos propensos a buscar atención médica, hablar sobre emociones o reconocer síntomas tempranos de enfermedad. Esto ha llevado a un mayor riesgo de mortalidad por condiciones prevenibles.
En este contexto, el nutriólogo desempeña un papel esencial: promover estilos de vida saludables, identificar factores de riesgo, educar sobre alimentación protectora y formar parte de estrategias multidisciplinarias de intervención. Este artículo analiza la relevancia del movimiento Movember y las oportunidades para los profesionales de la nutrición en su contribución hacia la salud integral de los hombres.
Panorama de salud masculina
En comparación con las mujeres, los hombres presentan:
- Mayor mortalidad por enfermedades cardiovasculares
- Mayor incidencia de cáncer de próstata y cáncer testicular
- Mayor consumo de alcohol y tabaco
- Menor probabilidad de acudir a servicios de salud preventivos
- Mayor tasa de suicidio, especialmente entre adultos jóvenes
El cáncer de próstata es el segundo tipo de cáncer más común en hombres a nivel mundial, y su detección temprana es clave para un pronóstico favorable. Por otro lado, el cáncer testicular afecta principalmente a hombres jóvenes entre 15 y 35 años. Además, la prevalencia de trastornos mentales en hombres está subestimada debido a barreras culturales para expresar vulnerabilidad emocional.
Nutrición en la prevención del cáncer masculino
La evidencia científica muestra que la alimentación tiene un papel relevante en la prevención de cáncer y enfermedades crónicas. Si bien no existe una “dieta anticáncer” única, ciertos patrones dietéticos se han asociado con menor riesgo.
Recomendaciones alimentarias clave
- Consumo elevado de frutas y verduras (especialmente crucíferas como brócoli y col)
- Fuentes de grasa saludable: aceite de oliva, aguacate, semillas, nueces, pescado rico en omega-3
- Fibra proveniente de legumbres, cereales integrales y verduras
- Proteína magra: pollo, pescado, leguminosas
- Hidratación adecuada; preferir agua simple
Alimentos con evidencia emergente beneficiosa
- Tomate y derivados (licopeno): efecto protector potencial frente al cáncer de próstata
- Té verde: compuestos antioxidantes
- Soya: posible reducción de riesgo en cáncer de próstata según algunos estudios
- Pescado azul: omega-3 y salud cardiovascular
Alimentos o hábitos a limitar
- Carnes procesadas
- Consumo excesivo de grasas saturadas
- Azúcares añadidos y bebidas azucaradas
- Ingesta elevada de alcohol
- Sedentarismo
La clave está en promover patrones alimentarios equilibrados y sostenibles.
Salud mental en hombres y rol de la nutrición
El bienestar emocional también forma parte de la salud masculina. Movember destaca la importancia de hablar sobre depresión, ansiedad y estrés, condiciones frecuentemente invisibilizadas.
La nutrición influye en el estado de ánimo mediante:
- Micronutrientes como vitamina D, complejo B, omega-3 y magnesio
- Fibra y alimentos que favorecen la salud intestinal
- Hábitos alimentarios que regulan energía y glucosa
Además, el nutriólogo puede:
- Fomentar estilos de vida activos
- Identificar señales de riesgo emocional
- Colaborar con psicólogos y psiquiatras
- Promover la relación saludable con la comida
Actividad física y salud masculina
La combinación nutrición + ejercicio es fundamental en prevención y bienestar:
- Mejora perfil cardiovascular y metabólico
- Regula peso corporal
- Reduce estrés y ansiedad
- Favorece masa muscular y salud ósea
- Impacta positivamente la autoestima
Recomendación estándar: 150 minutos semanales de actividad física moderada o 75 minutos intensa, junto con ejercicios de fuerza.
El nutriólogo como agente de cambio
- El profesional de la nutrición puede contribuir mediante:
- Educación comunitaria
- Sesiones individuales y grupales
- Participación en unidades de salud
- Talleres universitarios
- Campañas en redes sociales
- Trabajo multidisciplinario
La comunicación empática y libre de estigmas es clave, así como la promoción de chequeos médicos preventivos.
Movember es más que una campaña: es un recordatorio de la importancia de atender la salud masculina desde un enfoque preventivo y humanizado. La nutrición juega un papel fundamental en reducir riesgos de cáncer, mejorar salud mental, fortalecer el sistema inmune y promover hábitos que favorecen calidad de vida.
Los nutriólogos tienen la oportunidad de romper mitos, educar, acompañar y crear estrategias accesibles, basadas en evidencia y culturalmente sensibles. El bienestar de los hombres es un tema de salud pública, y la nutrición forma parte esencial de la solución.