Cada 7 de junio, el mundo conmemora el Día Mundial de la Inocuidad de los Alimentos, una fecha establecida por la ONU para reconocer la importancia de que los alimentos sean seguros en cada etapa de su cadena de producción y consumo. Como profesionales de la nutrición, tenemos un papel esencial en este tema: educar, prevenir y actuar frente a los riesgos que amenazan la seguridad de lo que comemos.
¿Qué es la inocuidad de los alimentos?
La inocuidad de los alimentos se refiere a la garantía de que los alimentos no causarán daño al consumidor cuando se preparan y consumen según lo previsto. Implica prevenir contaminaciones físicas, químicas o biológicas a lo largo de toda la cadena agroalimentaria: desde la producción hasta el consumo final.
Enfermedades transmitidas por alimentos (ETAs), como la salmonelosis, listeriosis o infecciones por E. coli, afectan cada año a una de cada diez personas en el mundo, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Muchas veces, estas enfermedades pueden prevenirse con acciones simples, pero fundamentales.
¿Por qué es importante para los nutriólogos?
Aunque frecuentemente se relaciona la inocuidad con la industria o la regulación, el nutriólogo es un agente clave en todos los niveles:
- Consulta clínica: orientar sobre prácticas seguras en el hogar (refrigeración, higiene, cocción).
- Educación comunitaria y escolar: enseñar sobre lavado de manos, uso adecuado de alimentos perecederos y manipulación correcta.
- Instituciones de salud y alimentación colectiva: colaborar en la implementación de sistemas de buenas prácticas de manufactura (BPM) y análisis de peligros (HACCP).
- Nutrición hospitalaria: prevenir riesgos en poblaciones vulnerables (niños, embarazadas, adultos mayores, inmunosuprimidos).
Factores de riesgo comunes
- Temperaturas inadecuadas de conservación
- Contaminación cruzada entre alimentos crudos y cocidos
- Higiene deficiente del manipulador de alimentos
- Agua no potable o utensilios contaminados
- Cadena de frío interrumpida en el transporte o venta
5 claves para alimentos inocuos (OMS)
La OMS promueve estas cinco claves como base de la inocuidad de los alimentos:
- Mantén la limpieza
- Separa alimentos crudos y cocidos
- Cocina completamente
- Mantén los alimentos a temperaturas seguras
- Usa agua y materias primas seguras
Estas acciones deben difundirse constantemente, tanto en la práctica profesional como en la educación alimentaria. Pequeños cambios pueden tener un gran impacto.
Garantizar la inocuidad de los alimentos salva vidas. En un mundo donde los sistemas alimentarios se enfrentan a retos globales como el cambio climático, la urbanización o la globalización del comercio, la vigilancia sobre la seguridad alimentaria es más importante que nunca.
Los estudiantes y profesionales de la nutrición tenemos la oportunidad y la responsabilidad de educar, prevenir y actuar.